Pequeños detalles, pequeñas manías, pequeños momentos, pequeñas señales, pequeños caprichos, pequeñas razones. Pequeñas, insignificantes, para muchos, para nosotros las que nos hacen sentir bien. ¿Que no me quieres? Pues ahora soy feliz sólo para joderte un rato. ¿Que ese tío me ha mirado? ¡Otra razón por la que ser feliz hoy! ¿Y mañana? Mañana vendrá otro y entonces podrás sonreír de nuevo. O, ¿quién sabe? Mañana aparece el cahaval que te hace reír el resto de tu vida. ¿Que lo llevas años esperando y nada de nada? ¡Sonríe!¡Le está costando lo suyo prepararse para ser lo suficientemente perfecto como para aparecer frente a tus ojos! ¿Te ríes de lo que digo? ¡Já! ¡Lo he conseguido!¡Has vuelto a sonreír una vez más! Merece la pena. Fuera problemas, fuera preocupaciones y malos rollos. Vamos a sonreírle a la vida. ¿Que no te gusta tu sonrisa?¡Vamooos! ¡ Que los rayos del sol te la tapan! Que tus ojos alumbran y dejan ciegos a aquellos que se atrevan a bajarte la mirada. ¿Chorradas dices que digo? ¡Já! Te pillé, sé que lo estás haciendo, sé que me estás sonriendo. ¿Que soy tonta? ¡Nada de eso! Te he hecho sonreir, que no es poco. 
Sonrie, venga tensa los músculos, china los ojos, sube las cejas, abre tu garganta, que se oigan tus sentimientos y que los vea todo el mundo. Sonrie. Sonrie. Sonrie.